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Miércoles, 23 de abril 2014, 15:44
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Después de las idas y venidas de la polémica que ha surgido con la segunda remodelación del espacio urbanístico en el que cada domingo se asienta el mercado dominical de Medina del Campo, el portavoz del equipo de gobierno (PSOE- PCAL/CI), Germán Sáez Crespo, intentó zanjar ayer la crisis interna del Ayuntamiento desmintiendo todas y cada una de las declaraciones realizadas por su compañera de filas, Begoña González Saornil, quien aseguró hace una semana que presentó su dimisión del cargo de concejala de mercadillos por «la imposibilidad de trabajar con la persona nombrada por Alcaldía (haciendo referencia a Antonio San José) para que me ayude en estas cuestiones».
Según Sáez Crespo, quien se puso del lado de San José (PCAL-CI) por al pacto de gobierno que alzó a Teresa López a la alcaldía medinense, las declaraciones realizadas por González habrían sido fruto del «exacerbamiento propio de una discusión interna». Asimismo, y con menor contundencia, hizo extensiva esta afirmación al secretario de Alcaldía, quien aseguró, cuando la noticia de la dimisión de González Saornil vio la luz: «Yo no estoy conforme con cosas que hace ella y no lo digo y mucho menos las meto por registro». Y agregó: «Aquí hay dos partidos políticos, que son el PSOE y el PCAL-CI. Y dentro del PCAL-CI hay unas cosas que acordamos y consensuamos con el partido socialista, como las pavimentaciones, el área de deportes y fiestas y el mercado, por lo que yo hago lo que me corresponde en este tema».
Además de reconocer las «dificultades» que tanto González como San José habrían vivido durante los últimos meses a raíz de la reorganización del mercadillo, el portavoz quiso dejar claro que en estos momentos «no existen injerencias por parte de nadie». Pero esta afirmación diferiría de la realidad, ya que durante toda la convocatoria pública, González Saornil quien solo musitó: «No tengo nada que decir»- y San José ni se cruzaron palabra y la tensión fue creciendo de manera exponencial hasta tal punto de que volvieron a alzar las voces en uno de los despachos del Ayuntamiento.
Con esta puesta en escena, el equipo de Gobierno de la administración local quiso zanjar la que sería la segunda crisis institucional (la primera la vivieron con la dimisión del que fuera concejal de Bienestar Social, Luis Gil) desde que hace tres años alcanzarán la Alcaldía. Por el momento, no ha trascendido el nombre del concejal que se hará cargo del mercadillo y será la propia alcaldesa quien anuncie el nombre del edil que se encargará de gestionar este espacio dominical.
El cambio de los artículos 5 y 12 de ordenanza municipal, que habría sido el detonante de esta tensión entre San José y González Saornil, tendrán que esperar al pleno del mes de mayo, ya que «no es un tema de urgencia para llevarlo al de este mes», explicó Sáez Crespo, quien destacó que San José estaría trabajando en la remodelación de los mercadillos debido a su experiencia en su etapa como concejal del Ayuntamiento de Valladolid.
Por el momento, la adjudicación de los puestos del mercadillo se realizará en las diferentes comisiones que se pongan en marcha y el encargado de formalizar el que será el segundo cambio estructural de este espacio será el secretario de Alcaldía, quien espera que el mercadillo «sea más accesible a todos los ciudadanos que acuden con asiduidad».
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